PARA EL UNIVERSO. PARTE 2.



Con cigarrillo en mano, 
como nunca lo volveré a hacer. 
Vamos a ser claros,
no tengo tema,
y en clase aprendí que cuando no hay una estructura profunda no hay estructura superficial.
Así que a ver qué pasa.

Estoy aquí, sin música alguna,
escuchando mis más severos pensamientos.
Es momento de ser sincera, 
de ser capaz de presentar ante ustedes,
mis ideas. 
Hace unos días reflexionaba acerca de la interacción que hoy tenemos.
Tú que lees y yo que escribo.
¿Somos reales?
Quizá.
Eres un lector anónimo, 
no conozco tu rostro,
pero quizá tú sí el mío.
Me conoces, 
o eso creemos. 
Quizá me ves caminar con mis audífonos puestos,
quizá hablas conmigo,
ríes conmigo,
o quizá sólo lees mis patéticas entradas.
Tengo que decirte,
que existo.
Mi vida es complicada,
como la tuya supongo.
Con ausencias,
falta de amor,
y algunos buenos momentos.
A veces la soledad me ahoga,
a veces no.
Tengo buenos amigos,
tengo personas a mi lado que entienden e ignoran lo que escribo.
¿Qué sucedería si esto fuese una nota de suicidio?
¿Atravesarían esta brecha y hablarían conmigo?
¿Me tomarían enserio?
¿O me dejarían caminar con mis audífonos puestos?
Ya llevo bastantes líneas y no he llegado siquiera al inicio de esto.
Me intriga la manera en la que hoy me relaciono con otros seres a mi alrededor.
Ignoro por gusto y otras veces por pura ignorancia.
Me molesto conmigo por no ser quien luche en contra de esto.
Parece que desconozco.
Me cuesta trabajo tener iniciativa,
me cuesta y mucho.
Estoy esperando a que alguien llegue,
esperando a que algo suceda.
Sin embargo, no hago algo al respecto.
Me quejo del universo,
y de los tragos amargos.
Me molesto conmigo y otras veces con él.
Estoy fastidiada porque no encuentro un porqué.
Cada vez que le miro,
lo miro con ojos distintos.
Entiendo que no hay un guión,
y que yo, cobarde, no pongo pongo de mi parte.
Estoy arrepentida,
y a veces confundida.
Le hablo al viento,
y otras veces al universo.
Es una entrada larga pero quiero que entiendan.
Un mensaje no directo,
pero cierto en cada momento.
Busco cualquier pretexto,
cualquier salida fácil,
pero al final no tengo lo que quiero.
Me engaño,
y me pongo el pie cada vez que hay algo nuevo.
Me siento burda y a veces un poco linda.
A veces ni sé quién soy.
Voy por la vida pensando en un mundo alterno,
existo en el aquí y ahora pero vivo en un mundo paralelo.
Necesito melodías para ahogar a veces lo que pienso.
Freno mis momentos de locura,
pienso más y hago menos.
Escribo esto quizá como justificación,
y también como acción.
Una advertencia,
o quizá pura demencia. 



Comentarios

Entradas populares de este blog

EFECTOS SECUNDARIOS DE LA E.

DETONAR

VERSOS LIBRES. TÍTULO SÉPTIMO: CERTEZA