AQUEL CHICO DE SUDADERA NARANJA...

Fue en aquella noche donde lo conocí. La música estaba un poco alta, había olvidado los cigarrillos así que decidí ir por unos. Soy menor de edad y aquel chico parecía tener más de 18, así que bueno, le pedí ayuda. No hablamos mucho, pero hubo una mirada la cual, no sé, me hizo sentir eso que, ¡WOW! No sé, es muy difícil de explicar. Después de eso no hay más que contar, la mente bloqueo tanto recuerdo, tanto de lo mismo. 

Así empezó todo, poco a poco sentí algo, ahora sé que no me enamore, pero yo en esos momentos en verdad que lo sentía...

Me enamore de aquel chico de sudadera naranja, aquel que tomaba mi mano al caminar, quien tenía planes de secuestrarme para llevarme lejos, aquel chico con unos chinos hermoso, aquel que con absurdos vídeos o lindos mensajes de voz me hacía sentir miles de mariposas revolotear por mi estómago.

Recuerdo cuando se refería a ella como "nuestra sobrina", recuerdo que ambos jurábamos que lo nuestro iba a ser para siempre, recuerdo que el prometió no hacer lo mismo que los demás, recuerdo que él dijo ser "UN GUERRERO LEGENDARIO".

¿Dónde quedo aquel joven? Esa es mi duda, ¿Por qué cambio de la noche a la mañana? ¿Qué buscaba? ¿Cuál era su plan? ¿Qué ganaría con hacer lo que hizo? ¿De verdad me quería? Y al final me quede con más que decirle y muchas preguntas que me gustarían que él me respondiera. Son lecciones de la vida que solo prueban que para ganar hay que perder.